Ingredientes: 2 barras de pan del día anterior o pan especial de torrijas, 1 l.leche, canela en rama, canela en polvo, azúcar, 4 huevos, aceite girasol.
Primeramente en un cazo ponemos leche más o menos 1 litro (para 2 barras de pan) y echamos como 6-8 cucharadas de azúcar y una hermosa rama de canela, lo removemos bien y en el primer hervor lo retiramos y dejamos reposar y enfriar.
El pan cortaremos las rebanadas inclinadas, para conseguir unas rebanadas grandes.
Batimos 2 huevos en un bol.
En un plato, prepararemos por cada 4 cucharadas de azúcar, lo mezclamos con media de canela en polvo.
En otro plato, ponemos papel de cocina para ir reposando las rebanadas de pan y quitar algo de aceite.
Con lo cual en la mesa de trabajo tendremos, bandeja con rebanadas de pan, cazo con leche tibia, plato con huevo batido, plato con papel de cocina, plato con azúcar y canela y una bandeja para presentar.
Una vez todo organizado, ponemos una sartén con aceite a calentar.
Cogemos unas 3-4 rebanadas de pan y las metemos en la leche la vamos dando la vuelta a la primera que hemos introducido y al terminar las sacamos y las mojamos en el plato con huevo batido, vuelta y vuelta, dejamos que el huevo sobrante caiga en el plato y la freímos en la sartén, así haremos con cada rebanada; primero leche, segundo huevo y tercero aceite. Una vez doradas por las dos partes, las apartamos en el plato con el papel de cocina y cuando la grasa haya reposado, las empanamos con el preparado de azúcar y canela por todas partes e inmediatamente a la bandeja.
En la primera fase con la leche podemos añadir si queremos una piel de naranja y una piel de limón, es a gusto del personal.
Y a disfrutar.
